El honor se tributa a una persona como prueba del bien que hay en ella
Tomás de Aquino
17/11/1999

Lorenzo Martín-Retortillo Baquer

Lorenzo Martín-Retortillo Baquer
Fecha acuerdo: 
04/05/1999
Rector: 
Juan José Badiola Díez
Padrinos: 

Fernando López Ramón, Eloy Fernández Clemente

Semblanza: 

La caracterización como universitario ejemplar es posiblemente la que mejor retrate al profesor Lorenzo Martín-Retortillo. Concurren en su persona una alta preparación científica, constancia en el afán intelectual, firmeza en el compromiso ético y entrega a la formación de nuevos universitarios.

Es, en primer lugar, un científico bien preparado, condición indispensable para producir los logros que se esperan del trabajo universitario. Estudios minuciosos, que justificaron los buenos resultados académicos del bachiller en Huesca y de la licenciatura en Derecho en Zaragoza. Después, el inicio de la especialización, nada menos que en el prestigioso Colegio de Bolonia, donde pasó dos años académicos, y en la Universidad de Tubinga, donde trabajó otro año, como becario de la Fundación March. Contó en todo caso para su formación con maestros excepcionales, ya en el ambiente familiar, con la destacada figura de su padre, Cirilo Martín-Retortillo, y de su hermano, Sebastián Martín-Retortillo, de cuya mano entrará a formar parte de uno de los equipos de mayor significado en la renovación intelectual de la Universidad española, bajo el magisterio del profesor García de Enterría. Magisterio completado con las enseñanzas de los profesores Alessi, en Bolonia, y Otto Bachoff, en Tubinga.

Junto a esas firmes bases de conocimiento, en la trayectoria profesional del profesor Lorenzo Martín-Retortillo cabe destacar, en segundo término, el afán intelectual, la voluntad de saber. El análisis jurídico le sirve como vía de conocimiento de realidades muy variadas, sobre las que ha ido publicando un importante conjunto de monografías y estudios. Los temas básicos de su labor investigadora están constituidos por las materias de protección del medio ambiente, defensa de la libertad religiosa, tutela de los derechos fundamentales, sanciones administrativas, reconocimiento de la autonomía universitaria, elaboración de la Constitución y reconocimiento de los derechos humanos en la Unión Europea. En esas materias, sus estudios constituyen referencia imprescindible, incluso elementos que han servido para vertebrar la reforma constitucional de algunas instituciones, como la introducción de los principios del Estado de Derecho en la moderna configuración de las sanciones de orden público.

El compromiso ético es, en tercer lugar, un componente esencial en la vida, personal y profesional, del profesor Lorenzo Martín-Retortillo, quizá conforme a los patrones krausistas. En todos los planos, económico, político y social, se advierten claramente manifestaciones de un especial talante, poco dado a las componendas acomodaticias. Su tarea es la universitaria. Desde la toma de posesión de su cátedra, a finales de los años sesenta, la dedicación a la Universidad ha sido exclusiva, como se decía entonces, o a tiempo completo, como hoy establece la normativa. Casi un militante de la exclusiva, huyendo del dinero fácil, sin anhelo de la abundancia material. En el plano político, cabría destacar su contribución al aposentamiento de los principios democráticos, desde aquellas clases de los primeros setenta, cargadas de significativas referencias a la actualidad detestable, hasta su participación en el proyecto colectivo de “Andalán”. Instaurado el régimen democrático, cumplirá una breve pero importante etapa como senador, elegido en aquella magnífica plataforma de ciudadanía que fue la “Candidatura Aragonesa de Unidad Democrática”. Su labor en las Cortes constituyentes está bien reflejada en el contenido y aun en el mismo título de dos de sus libros: Bajo el signo de la Constitución y Los trabajos de un profesor en la Comisión Constitucional del Senado. Siempre dispuesto a poner sus conocimientos al servicio de las causas importantes: para fundamentar la oposición al trasvase del Ebro, para exigir la liberación de periodistas encarcelados, para reclamar el establecimiento de las libertades públicas, para constituir adecuadamente la autonomía aragonesa, para postular un urbanismo humanizado, para defender el medio ambiente de contaminaciones sonoras, etc.

El anterior conjunto de referencias al significado universitario del profesor Lorenzo Martín-Retortillo quedaría incompleto si no se mencionaran su capacidad y sus logros como formador. Sus clases y conferencias son siempre de las que hacen pensar al auditorio. Enseña, educa, no se limita a dictar unos ciertos contenidos. Tanto por lo sugestivo de sus presentaciones formales -vía oral y vía escrita- como por la hondura de su pensamiento, logra que los estudiantes inquietos se interesen por saber más y reflexionar más. En su labor de maestro, destaca la formación de vocaciones universitarias. Lidera la llamada Escuela de Zaragoza, que ocupa un lugar significativo en el panorama de las ciencias administrativas, con extensiones, desde la Universidad de Zaragoza a las Universidades Complutense, de Cantabria, Lérida, La Rioja y Burgos. Una decena de catedráticos y una veintena de profesores titulares componen ese grupo investigador, en constante ampliación por la incorporación de nuevos talentos.

Autor semblanza: 

Fernando López Ramón