El honor se tributa a una persona como prueba del bien que hay en ella
Tomás de Aquino
22/06/2007

Alberto Bercovitz Rodríguez-Cano

Alberto Bercovitz Rodríguez-Cano
Fecha acuerdo: 
02/02/2006
Rector: 
Felipe Pétriz Calvo
Padrinos: 

Ignacio Quintana Carlo, José Antonio García-Cruces González

Semblanza: 

Alberto Bercovitz Rodríguez-Cano nació en Madrid el 18 de noviembre de 1937. Está casado y es padre de dos hijos, ambos profesores de Derecho en la Universidad española.

Tras estudiar el Bachillerato en el Liceo Francés, cursó la licenciatura en Derecho en la Universidad de Madrid durante los años 1954 a 1959. Finalizada la carrera se incorpora como ayudante de clases prácticas en la Cátedra de Derecho Civil de la Facultad de Derecho, dirigida por el profesor García-Valdecasas.

Pero  el profesor Bercovitz ya manifestó en aquel entonces su preferencia por el estudio del Derecho de la Propiedad Industrial, materia a la que -pese a su innegable importancia– no le prestaban una particular dedicación los juristas españoles. De este modo, obtuvo una beca concedida por el Gobierno de Baviera que le permitió, bajo la dirección de los profesores Karl Larenz y Eugen Ulmer, llevar a cabo sus estudios en la Facultad de Derecho de la Universidad de Múnich y, en particular, preparar su tesis doctoral en el Instituto de Derecho de autor y Propiedad Industrial de dicha Universidad y en el Patentamt, tesis que realizó bajo la dirección del profesor Ulmer.

De regreso a España, en 1962 se incorporó a grupo de investigadores que dirigía su maestro, don Joaquín Garrigues, en la Universidad de Madrid, primero como profesor ayudante y luego como profesor adjunto, hasta la obtención en el año 1970 de la Cátedra de Derecho Mercantil en la Universidad de Murcia. Finalizado el curso académico el profesor Bercovitz accede, mediante concurso de traslado, a la Cátedra de Derecho Mercantil de la Universidad de Salamanca, en la que va a permanecer durante ocho años.

Son estos ocho años en el alma mater salmanticense los que van a marcar loa vida universitaria de Alberto Bercovitz. En dicha Universidad, ocho veces centenaria, nuestro doctor honoris causa se integra en un claustro en el que se encuentran profesores de la talla académica de Gloria Begué, Francisco Tomás y Valiente, Lorenzo Martin Retortillo, José Delgado Pinto, José Vida Soria y otros que van a propiciar un auténtico “renacimiento” de una Facultad de Derecho que, salvo honrosas excepciones, miraba más hacía su glorioso pasado que a su futuro. En dicha Universidad comienza, además, a reunir en torno a si a una serie de personas que le consideran su maestro y que van a constituir el germen de lo que entre los mercantilistas actuales se conoce como “la escuela de Salamanca”.

Concluida su etapa salmantina, en el año 1980 el profesor Bercovitz accede por concurso a la Cátedra de Derecho mercantil de la UNED, en Madrid. En dicha Universidad, aunque las características de su sistema de enseñanza hacen más difícil la formación de profesorado, Alberto Bercovitz continúa despertando nuevas vocaciones y atrayendo nuevos discípulos, con la peculiaridad, derivada del ámbito “nacional” del centro, de que estos están repartidos por todo el territorio nacional e, incluso, por el extranjero.

Trayectoria profesional – no universitaria – del profesor Bercovitz.

La trayectoria científica del profesor Bercovitz se ha proyectado, también, en otros ámbitos distintos al universitario. Los conocimientos pacientemente adquiridos y su contraste con la práctica y las necesidades a las que han de servir, le llevaron a participar en distintas instancias dirigidas a la renovación de la normativa jurídico-privada, tanto nacional como internacional, que regula las relaciones económicas.

Así, su buen hacer le llevó a representar a nuestro país en distintos foros internacionales en su calidad de experto, participando en la Conferencia de Derecho Internacional de La Haya, para los trabajos preparatorios de un Convenio sobre ventas a los consumidores (mayo 1979); en la XIV Sesión de la Conferencia Internacional de La Haya de Derecho internacional privado, para el tema de ventas a los consumidores; en la Commission spéciale sur la loi applicable aus ventes internationales des mercandises, en la Conferencia de La Haya de Derecho Internacional Privado; en la Delegación de España en la Conferencia Internacional para la revisión del Convenio de París para la protección de la Propiedad Industrial, celebrada en Nairobi; como representante de la UNCITRAL (CNUDCI), en la reunión celebrada en Viena en el mes de enero de 1981, para el estudio de un nuevo Convenio Internacional sobre letra de Cambio y Cheque; o su participación como miembro español de la Commission on European Contract Law, dirigida por el profesor Ole Lando, entre muchas otras. En este ámbito, también ha de reseñarse su nombramiento como vocal asesor de la Comisión de Cooperación Jurídica Internacional dependiente de los Ministerios de Justicia y Asuntos Exteriores.

También en el seno de la Unión Europea se ha podido contar con sus esfuerzos, pues fue presidente, durante el primer semestre de 1989, del grupo de trabajo del Consejo de las Comunidades Europeas para el estudio de una propuesta de Directiva para la protección de las invenciones biotecnológicas; al igual que participó como experto designado por la Comisión de las Comunidades Europeas en las reuniones de Legal Advisory Board (LAB) de la donG. XIII, sobre la responsabilidad en materia informática, entre otras muchas actuaciones.

El esfuerzo científico desarrollado por el profesor Bercovitz ha plasmado sus resultados, de igual modo, en lo que hace a las tareas prelegislativas en España. Su influjo se ha dejado sentir en múltiples textos prelegislativos que han provocado, frente a las limitaciones de la normativa codificada, una renovación integral del Derecho Mercantil y Económico de nuestro país en poco más de veinte años.

El profesor Bercovitz también ha participado en otro tipo de actuaciones favorecedoras de los procesos de autorregulación, formando parte de la Comisión especial para el fomento de la transparencia y la seguridad en los mercados financieros y las sociedades cotizadas (Comisión Aldama).

En la actualidad, el profesor Bercovitz desempeña el cargo de presidente de la Sección Segunda, de Derecho Mercantil, de la Comisión General de Codificación del Ministerio de Justicia (R.don 1035/2006), de 15 de septiembre) que ha asumido decididamente la tarea de llevar a cabo una recodificación mercantil que, mediante la integración en un código de toda la normativa vigente en dicho sector del ordenamiento.

La trayectoria profesional y académica del profesor Bercovitz ha sido objeto de reconocimiento tanto dentro como fuera de nuestras fronteras. Así, en 1987 fue nombrado doctor honoris causa por la Universidad de Lyon III - Jean Moulin – (Francia), y en 2007 por las Universidades de Zaragoza (España) y de Buenos Aires (Argentina), además de haber recibido distintos premios y reconocimientos (Encomienda de la Orden de Alfonso X El Sabio, Cruz de la Orden de San Raimundo de Peñafort, Premio Julio Delicado al estudio y difusión del Derecho industrial otorgado por la Fundación García Cabrerizo, Medalla de la AIPPI, etc.)

Su obra científica constituye un magnífico ejemplo de cómo abordar el reto de la interdisciplinaridad o, si se quiere, incluso de la unidisciplinaridad de dos de las ciencias sociales más importantes: el Derecho y la Economía. Sus aportaciones en materia de Derecho de la competencia en sentido lato, sus reflexiones sobre el papel del consumidor en el tráfico mercantil y su propia concepción de esta rama del ordenamiento jurídico como el “Derecho privado del tráfico económico” constituyen sobradas muestras de esta interdisciplinaridad. Por otra parte, dicha obra constituye un excelente antídoto contra la tentación especialista. Por decirlo con sus propias palabras, en estos tiempos que corren, en que la especialidad es entendida “como una declaración no sólo de independencia, sino más bien de autarquía”, el profesor Bercovitz, consciente de que un estudio autárquico de un Derecho especial es necesariamente incompleto y a menudo conduce a conclusiones erróneas, cuando se enfrenta al análisis de los distintos institutos jurídicos lleva a cabo una labor integradora, en el sentido de que sitúa y relaciona el objeto de estudio dentro del ordenamiento jurídico tomado en su conjunto.

Por último, la obra y la vida del profesor Bercovitz constituyen un ejemplo del compromiso del intelectual con la sociedad de su tiempo encaminado a mejorar la condición humana. Las universidades no pueden ser un gueto en el que se hace ciencia (o se pretende que se hace) al margen de los problemas de la humanidad y que son problemas de desigualdad, pobreza, abuso de poder y ataques contra la libertad que acaban golpeando, casi por definición, a los más vulnerables. A la búsqueda de soluciones técnicas a estos problemas y, en otras ocasiones, a la denuncia de los mismos se ha dedicado el nuevo doctor tanto a través de su obra científica – ahí están sus trabajos en materia de Derecho de patentes (sobre todo los referidos a la protección de los resultados de la investigación en las universidades y centros públicos, las patentes laborales, la limitación de los derechos del titular de las patentes químico-farmacéuticas en los países del tercer mundo y las invenciones biotecnológicas) y la protección de los consumidores en el tráfico mercantil - como con su defensa de la Universidad como reducto de libertades, lo que le llevó en la década de los setenta a ser sancionado por las autoridades académicas franquistas junto con otros profesores por criticar la política universitaria del régimen.

Autor semblanza: 

Ignacio Quintana Carlo